Salpicón templado de pulpo

El salpicón de pulpo es un plato típicamente veraniego que podemos encontrar en chiringuitos de zonas de playa, cómo también lo podemos encontrar en zonas refrigeradas de nuestros supermercados ya hecho.

La verdad que es un plato muy rico que no necesita mucha elaboración, por lo que recomiendo que lo hagáis vosotros/as mismos/as. Para que nos cueste menos tiempo hacerlo, podemos comprar el pulpo ya cocido, que da muy buen resultado y nos ahorramos un tiempecillo, por no olvidar que la textura del pulpo ha de ser exacta, si queda muy blando no concuerda muy bien con el crujiente de las verduras... Si queremos cocer el pulpo nosotros/as mismos/as tenemos que tener mucho cuidado.

 

Ingredientes para dos personas:

1. Al menos dos tentáculos de pulpo de tamaño medio (uno por persona).
2. Un pimiento morrón rojo.
3. Un pimiento verde.
4. Cebolla.
5. Zanahoria.
6. Dos dientes de ajo.
7. Pimentón al gusto (dulce o picante).
8. Sal, aceite virgen extra y vinagre de vino.

Elaboración:

   Lo primero que haremos será picar todas las verduritas: pimiento verde, rojo morrón, la cebolla, zanahoria y los dientes de ajo y reservaremos. Trocearemos mientras tanto el pulpo, en trozos que no sean ni muy gruesos ni muy finos, un punto intermedio, queremos que todos los sabores estén equilibrados cada vez que tomemos una porción con el tenedor o cuchara.

   Cuando tengamos todos los ingredientes troceados, pondremos una sartén a fuego medio-bajo con aceite de oliva virgen extra. Entonces agregaremos las verduras, y las saltearemos un poquito tres o cuatro minutos, no más. Entonces agregaremos una cucharada de pimentón (para mi gusto mejor picante) y seguiremos salteando durante poco tiempo para que no se queme el pimentón. Agregaremos el pulpo y saltearemos un minuto.

    Al tenerlo todo salteado, lo servimos en un plato y esperamos que se atempere un poco. Si nos apetece lo podemos dejar enfriar por completo, incluso enfriarlo en la nevera para disfrutarlo los días de mucho calor, ya que entra solo.

   Cuando lo tengamos frío o templado, depende de cómo nos guste más, lo que haremos será agregarle en vinagre y la sal (si es sal de cristales mejor qué mejor). Se puede poner cualquier vinagre, pero recomiendo que sea blanco, para que quede más fresquito. ¡No olvidéis echar un chorrito de aceite virgen extra crudo!

   Solamente nos queda emplatar y disfrutar.

   On egin!!